Desde siempre, los chándales para niños han sido una de esas prendas que se caracterizan por ser enormemente versátiles. Ideales para practicar deporte o para otros ámbitos como el escolar, es una de esas prenda que no puede faltar en el armario de los más pequeños de la casa.

Estas circunstancias ha hecho que desde Kelme no hayamos dudado ni un solo instante en volcarnos en nuestra colección de chándales para niños. Diseño, resistencia y comodidad se dan de la mano en una prensa única.

Los mejores materiales y detalles para nuestros chándales para niños

Por encima de todo, cuando se trata de un chándal, lo que se busca es que sea cómodo. Esto se ha conseguido gracias al uso del polyéster en la confección del 100% de esta prenda. Pero es que además, este material no solo aporta comodidad sino también un elevado grado de resistencia tanto al paso del tiempo como a algo tan temido como los lavados. Los colores y la estructura del chándal siempre serán las mismas que las del primer día.

Pero aún hay más. A los materiales de primera calidad utilizados tanto en las chaquetas como en los pantalones, hay que añadir otros detalles que son los que marcan la diferencia. Cremalleras en los bolsillos así como unos tobillos que se ajustan al cuerpo a la perfección potencian al extremo la comodidad. De esta manera, tanto si se utiliza para practicar deporte como si se utiliza para lucir un estilo casual, el niño o niña que lo lleve estará cómodo en todo momento.

A todo esto hay que añadir un detalle fundamental que no es otro que el de la variedad. Nos hemos esforzado mucho para poner a disposición de los más jóvenes un catálogo en el que prime, por un lado la variedad de colores y, por otro, un gran abanico de tallas.

De lo que se trata es de que cualquier pueda lucir uno de estos chándales.

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